Por Cristian Aguilar
Se puede dialogar por horas sobre lo que se puede hacer en GTA V. GTA V tiene esa abundancia de momentos, grandes y pequeños, que hacen a San Andreas – La ciudad de Los Santos y sus áreas aledañas – sentir como un mundo vivo donde cualquier cosa puede suceder. Te da tanto la oportunidad de explorar un mundo bellamente realizado como también de participar en una historia que es atrayente, adictiva y oscuramente cómica. Es un gran salto en la sofisticación de la narrativa y no hay elementos de mecánica de juego que no hayan sido mejorados desde Grand Theft Auto IV. Rockstar al fin elimino uno de los problemas que más tribulada esta aclamada serie, los puntos de salvado dentro de una misión (los famosos “checkpoints”), asegurándonos que esta vez no tendremos que conducir seis o más veces al mismo lugar después de fallar una misión repetidas veces.
Grand Theft Auto V es también un inteligente, retorcidamente cómico y revelador comentario sobre la América contemporánea después de la crisis. Todo respecto al juego derrama sátira: celebridades, derechistas, izquierdistas, la clase media, los medios... Nada está a salvo de la lengua filosa de Rockstar, incluyendo juegos de video modernos. GTA V se enfoca en la realidad americana. La atención que se tuvo en los detalles hacen que el mundo de GTA V se sienta vivo y creíble, haciendo la sátira aun más efectiva.
La trama de Grand Theft Auto V opera al borde del margen de lo posible, enviándote a montar bicicletas en el techo de un tren o secuestrar aviones militares, pero los tres personajes principales son lo que siempre mantiene la trama dentro de lo posible. Las bien escritas y actuadas interacciones entre ellos proveen las carcajadas y los momentos más efectivos. La manera como la relación entre estos tres personajes cambia según adentramos en la historia y la manera en que la opinión misma del jugador se ve afectada en respecto a cada uno de estos personajes es lo que le da el poder a la narrativa. Los personajes se sienten como personas reales, estropeadas, pero personas al fin.
Esta estructura de tres personajes (Michael, Franklin and Trevor) le dan un tiempo de desarrollo y variedad excelente a la historia, pero también le dio a Rockstar la posibilidad de segmentar la personalidad de Grand Theft Auto. Varias de las misiones de Michael giran alrededor de su familia y su pasado, Franklin generalmente se la pasa creando caos vehicular, y la violencia insignia de la serie viene de la mano de Trevor. Narrativamente esta mecánica es efectiva – aun fuera de misión los personajes son apegados a sus personalidades, actuando como un hombre en plena crisis de la mediana edad y problemas de control de la ira como Michael, un busca emociones como Franklin y un maniático como Trevor.
GTA V logra solucionar un problema que está siempre en los juegos de mundo abierto: la tensión que se crea entre la historia que los escritores quiere contar y la historia que el jugador mismo crea al tener tanto acceso al mundo abierto. Grand Theft Auto V acomoda ambos aspectos, de una forma magistral, no permitiendo que una opaque a la otra.
La habilidad de cambiar de personaje se siente como una ventana para indagar un poco más en los hábitos naturales de cada uno, dándole aun más profundidad a los rasgos de personalidad. Al escoger un personaje la cámara hace zoom negativo hacia el mapa de San Andreas, para luego hacer zoom sobre el personaje seleccionado donde quiera que este se encuentre.
El juego te permite llevar a cabo casi cualquier actividad: tenis, yoga, alpinismo, carreras en mar o tierra, volar aviones, jugar golf, ciclismo, buceo, cacería y más. La manera en la que San Andreas se presenta ante el jugador nunca se siente artificial. El mapa es completamente abierto desde el inicio, lo que contribuye a la sensación de que es un lugar real, en alguna parte que puedes llegar a conocer. Si Liberty City de GTA IV se sentía como una ciudad viva, San Andreas se siente como un mundo vivo.
Exige y lleva al Xbox 360 y PlayStation 3 al límite y con todo derecho, el juego es visualmente increíble. El cambio más grande en calidad con respecto a Grand Theft Auto IV es la animación de los personajes, pero el mundo es mucho más expansivo, detallado y poblado. El precio que se paga por lo anteriormente mencionado es una leve decaída de vez en cuando en los cuadros por segundo y una que otra textura que no carga bien, cosas que se presentan entre más tiempo se lleva jugado, pero siendo las dos anteriores factores que realmente no distraen de la experiencia final. Para un mundo tan gigante y flexible esta maravillosamente libre de bugs.
Grand Theft Auto V es no solamente un juego tremendamente disfrutable, es una inteligente y tenaz sátira de la América contemporánea. Representa un refinamiento de todo lo que GTA IV puso en la mesa cuatro años atrás. Esta técnicamente mejor realizado en cualquier posible manera de ver, pero es también muy ambicioso en su propia manera. Ningún mundo en un videojuego se asemeja a este juego en tamaño y espectro, habiendo una cierta inteligencia detrás de su humor negro y tendencia a la violencia. Cuenta una irresistible, impredecible y provocativa historia sin nunca interponerse en tu manera de buscar aventuras en San Andreas.
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